Los dos pantalones

Recuerdo, que hace muchos años atrás, estaba recibiendo clases de Inglés por un profesor cristiano. En las prácticas para acostumbrar al oído a la pronunciación inglesa, el nos dijo una anécdota que jamás se me ha olvidado. Él decía:


Había dos esposas de pastores arreglándole unos pantalones a sus respectivos esposos. Una de ella se quejaba de que la Iglesia que pastoreaba su marido no prosperaba a pesar de que ya hacía varios años que la estaban pastoreando.


La otra le testificaba la bendición que ellos tenían en su Iglesia y que a pesar de que no hacía tantos años, como ellos, que habían tomado el pastorado de la Iglesia, sin embargo, la Iglesia había crecido y tenía buena salud espiritual.


__ ¿Puedes decirme cuál es el secreto de la bendición que ustedes tienen? – Preguntó una.


__ Sí, como no. Dime, ¿qué parte del pantalón estás arreglándole a tu esposo? __ Le respondió la otra con otra pregunta.


La hermana se quedó pensando en a qué venía esa pregunta, pero se animó a contestar:


__ La parte de los fondillos __Contestó.


__ Ahí es donde está el problema. Yo le estoy remendando la parte de las rodillas al pantalón de mi esposo.


Pregunta: ¿Qué parte de tu pantalón se te rompe primero?. Resérvate la respuesta, pero piensa.